Si hay una flor que más represente los meses de Verano en cualquier jardín, terraza o ventana es sin duda la Petunia.
La Petunia es una planta de la familia de las Solanáceas formada por 23 especies.
Originaria de Sudamerica se encuentra presente en todo el mundo por su sencillísimo cultivo y la abundancia de su floración en la época estival.
Se trata de una planta de hoja perene de escasa altura que florece abundantemente a finales de primavera y durante todo el verano.
Sus tallos son carnosos, ramificados y cubiertos de hojas de escaso tamaño alargadas o algo redondeadas. Ambos, tallos y hojas, se encuentran recubiertos de cierta vellosidad ligeramente pegajosa.
Sus abundantes y características flores son pedunculares y tienen forma de trompeta más o menos grande. Esta trompeta es bastante frágil sin tener separación en pétalos.
Existen de muchos colores, blancos, rosas, rojos, morados hasta azules oscuros, pero nunca de color naranja.
La duración de la flor es más bien corta pero se compensa con la abundante floración que desarrolla cada planta. Su carácterístico aroma al desprenderse las flores es otra de sus señas de identidad.
Las petunias necesitan gran cantidad de luz y sol directo. Es el motivo por el que se desarrollan muy bien en los meses de verano el lugares muy soleados y soportan el calor intenso siempre que estén bien regadas.
Su cuidado por tanto es muy sencillo, mucha luz y sol directo y riego casi diario, manteniendo la tierra húmeda pero no continuamente encharcada.
Una variedad muy popular de la petunia es la Surfinia. De aspecto practicamente igual, se diferencia de la Petunia clásica por su crecimiento menos vertical y más colgante y también por su durabilidad.
Es más resistente que la Petunia clásica y su floración se prolonga pasado Agosto hasta bien entrado el Otoño.
Si quieres alegrar tu jardín o terraza, la Petunia la vestirá de flores todo el verano!!
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